KAREN PATRICIA

Me llamo Karen Patricia Urrutia Benavidez, tengo 31 años, soy nicaragüense y estaba estudiando Ingeniería Agropecuaria cuando tuve que salir de mi país por la situación sociopolítica. Allí trabajaba como dependienta en un supermercado y aquí soy cuidadora.

Las migraciones en ocasiones están fuertemente condicionadas por factores económicos y sociopolíticos e influidos por las políticas y normas de los gobiernos (Giménez, 2003)

“¿Por qué me vine aquí? Pues a raíz de la situación sociopolítica en mi país. Yo era estudiante de tercer año de ingeniería agropecuaria y la Universidad en la que yo estudiaba tenía una postura contraria a la del gobierno (…) A mí me andaban en una lista de los que andaban en las protestas en las marchas y pues, mi mamá y yo también pensamos que mi vida corría peligro. La única opción que ella vio era que yo saliera del país, como la mayoría de mis compañeros, tuvimos que salir del país porque teníamos miedo miedo de que nos fueran a quitar la vida, o que tomaran represalias en nuestra contra”.

Para muchas de las mujeres migrantes  el  servicio  doméstico es en su proyecto migratorio un  trabajo  refugio,  provisional, que les permite acceder al mercado  laboral,  y  de  este  modo  acceder  a  la  regularización  administrativa “conseguir los papeles”.

Recién llegadas al país tienen una necesidad mayor y optan a esos trabajos de cuidados en régimen de interna como primera experiencia laboral en el país de acogida.Si embargo, al  ser el centro de trabajo el hogar del empleador, la relación se rige por una alta informalidad, y son habituales comentarios ofensivos o discriminatorios, que a su vez no están sometidos a ningún tipo de control ni sanción en la mayoría de las ocasiones. Las trabajadoras suelen desconocer que tienen derecho a un salario mínimo interprofesional, así como a la necesidad de elaborar un contrato y cotizar en la Seguridad Social. Este desconocimiento aumenta sus probabilidades de sufrir abusos por parte del empleador en cuanto a la determinación de salario, pagas extras, vacaciones, etc (González, 2019)

“Gran parte de la experiencia fue mala( …) Me hacía que me levantara en la madrugada, no me daban ningún día libre, ni siquiera cobraba el salario mínimo, no tenía derecho a nada y me trataba mal”. 

Iniciar una nueva vida, en otro país, es difícil, teniendo que adaptarse y hacer frente a nuevas dificultades sociales, laborales y económicas surgidas en el proceso de asentamiento en el país de acogida. El proceso migratorio acentúa los sentimientos de aislamiento y soledad generados al enfrentarse a un entorno desconocido (Blanch, 2005).

Para la protagonista de esta foto, ha sido un elemento facilitador en su proceso de adaptación al contexto de acogida, la participación activa en la Asociación de Trabajadoras del Hogar y los Cuidados.

“Solo quiero seguir luchando para salir adelante como todas las que emigramos, pero me encontré una gran muralla, al estar en situación irregular no tengo muchas opciones de trabajo, no puedo cotizar, y muchas veces ando con temor que me pare la policía y me pidan documentación. Soy parte de la Asociación de trabajadoras del hogar y me gusta, porque ahora tengo conocimiento que antes no tenía sobre mis derechos y siento que de alguna manera puedo transmitir a otras mujeres lo que ahora sé y que juntas podemos luchar por ellos”

El asociacionismo permite superar el aislamiento social, fomentar la sociabilidad, intercambiar experiencias, y lo que no es menos importante, encontrar referentes. Esta forma de unión responde entre otras necesidades, como las de reunirse, dialogar, intercambiar afectos, inquietudes y experiencias (Blanch, 2005).

También permite generar un marco de pertenencia que proporciona seguridad y facilita construir estructuras de oportunidad para sortear las limitaciones que tienen las personas migrantes como ciudadanos.

Es una forma de incidir, de reivindicar la participación en la sociedad de acogida y también es una forma de apoyo entre mujeres con las mismas dificultades.

Me pregunto si 1095 días serán suficientes para pagar mi deuda y recuperar mi identidad

#EstrabajoEstrabajadoraEsCiudadana

#SeUnaEmpleadoraJusta